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1. Puente de O Burgo
Paseo da Ría do Burgo (fuera de la ciudad, 7 km)
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2. Peña de Galiacho
Monte da Zapateira
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3. Iglesia San Vicente de Elviña
Rúa Camiño da Iglesia
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4. Placas por los caídos en la Batalla
Rúa Camiño da Iglesia
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5. Granja de los Franciscanos en la Universidad de A Coruña
Rúa Lisboa
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6. El monolito del mariscal Soult, Duque de Dalmacia
Campus Universidade da Coruña
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7. Parque de Santa Margarita
Parque de Santa Margarita
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8. Placa conmemorativa
Cantón Grande, 5
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9. Óleo de la Batalla
Palacio Municipal (Praza María Pita)
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10. Puerto de A Coruña
Avenida do Parrote
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11. Castillo de San Antón
Avenida do Parrote
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12. Paseo de Sir John Moore
Paseo de Sir John Moore
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13. Museo Histórico-Militar
Praza Carlos I, 1
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14. Jardín-Baluarte de San Carlos
Paseo de Sir John Moore
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15. Calle de Napoleón
Calle de Napoleón
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16. Batería, capilla y faro de Oza
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17. Batería Faro y Capilla de Oza
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1. Puente de O Burgo

Paseo da Ría do Burgo (fuera de la ciudad, 7 km)

El puente de O Burgo une los municipios de Cambre y Culleredo, a 7 km de A Coruña. En ese punto tuvo lugar el primer combate entre el ejército británico y el francés, previo a la batalla de Elviña.

Desde la época romana han existido puentes en ese emplazamiento, según consta en una estela descubierta en las proximidades. El puente actual es una reconstrucción de otro puente medieval, que permanecía en uso durante el siglo XIX hasta que lo vuela el ejército inglés en su retirada hacia A Coruña.

La estrategia del general Moore, al mando de la fuerza expedicionaria británica, consistía en una retirada ordenada hasta los puertos de A Coruña y Vigo, donde la armada británica llegaría a tiempo de evacuar las tropas. En dicha estrategia, la retaguardia británica, el ejército español y las guerrillas se enzarzan en una serie de escaramuzas con la vanguardia del ejército francés y, entre otras acciones, la voladura del puente de O Burgo sirve para retrasar su avance.

El puente de O Burgo fue volado el 11 de enero de 1809 y permaneció en estado de ruina hasta su restauración en 1992. El puente actual tiene once arcos, seis originales del antiguo puente, y algunos mantienen los tajamares característicos de la época, edificados para defender la estructura de la acción de las mareas.

El puente original contaba con mayor número de arcos, hoy soterrados bajo la infraestructura de canalización de la Ría de O Burgo. Hoy existe un puente moderno en las inmediaciones del antiguo para desviar el tráfico rodado. El Puente de O Burgo restaurado, hoy monumento, conserva el uso peatonal y recreativo.

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2. Peña de Galiacho

Monte da Zapateira

La Peña de Galiacho, en las estribaciones del Monte da Zapateira, fue el emplazamiento que eligió Soult para dirigir la artillería durante la batalla de Elviña.

La peña de Galiacho queda hoy dentro de la Universidad, en la carretera a la Zapateira (Conjunto Campus Universitario, 73), y ofrece al visitante un mirador y diversas placas conmemorativas de la batalla. La explicación tradicional sobre el topónimo relata que “Peña de Galiacho” procede del mote humorístico: "Peña del gabacho”. Los españoles de 1809, conocedores de la presencia del Mariscal en el lugar, inventaron ese apodo que, con el paso de los años y la evolución de la lengua, termina por transformar la palabra “gabacho” en “Galiacho”.

A lo largo de los años, las asociaciones históricas coruñesas y organismos oficiales, españoles y extranjeros, han añadido placas conmemorativas de la batalla de Elviña y de los combatientes. Destaca, por su tamaño y detalle, un mural de cerámica de Talavera de la Reina pintado a mano, de 2,70 por 1,80 metros, que explica en español e inglés el orden de batalla y la cronología de la misma.

A las inauguraciones de las placas, coincidentes con alguna efeméride de la batalla, han acudido diferentes autoridades locales e internacionales como el Príncipe de Gales en 1931, el embajador inglés en 1997 o el embajador francés, en 2001, quien descubrió el citado mural cerámico de la batalla.

3. Iglesia San Vicente de Elviña

Rúa Camiño da Iglesia

La parroquia de San Vicente de Elviña (Igrexa de Elviña, 9) está ubicada en lo que fue la primera línea de la batalla de A Coruña, también conocida como la Batalla de Elviña. En ese emplazamiento se produce el encuentro entre el ejército francés del mariscal Soult y las posiciones defensivas del teniente general Moore.

El escocés Moore, al mando de la fuerza expedicionaria británica, plantea una defensa escalonada para que el grueso de las tropas disponga de tiempo para retirarse hasta el puerto y evacuar la ciudad. La primera línea se establece en la zona del actual campus universitario, donde se ubica la iglesia de San Vicente, la segunda en lo que era entonces el municipio de Oza y la tercera en los altos de Santa Margarita, frente al istmo de entrada a A Coruña.

Respecto a la edad de la iglesia de San Vicente de Elviña, las características arquitectónicas y las marcas de los canteros en los capiteles permiten datar la construcción a lo largo de un período entre el final del siglo XII y comienzos del siglo XIII. La iglesia sobrevivió a la batalla de 1809, fue quemada en 1933 con el resultado de la destrucción del interior y restaurada en 1942 hasta el estado actual. Desde el siglo XX, en la vía que discurre frente al crucero la iglesia de San Vicente se han colocado varias placas de homenaje a los caídos, de todos los ejércitos, que combatieron en la batalla de Elviña.

4. Placas por los caídos en la Batalla

Rúa Camiño da Iglesia

Las placas de homenaje a los caídos en la batalla de A Coruña pueden contemplarse en la Rúa Camiño da Iglesia, adyacente al crucero de la Iglesia de San Vicente de Elviña.

La primera placa data de enero de 1999 y fue inaugurada por el embajador británico en España durante la conmemoración del 190º aniversario de la batalla. La placa está coronada por un grabado de las banderas británica y francesa entrelazadas y, bajo las enseñas, una inscripción en los español, francés e inglés: “En memoria de los caídos en la batalla de Elviña el 16 de enero de 1809”.

Una segunda placa de mármol, del 26 de julio de 2002, recuerda al general francés Manigault-Gaulois, caído en la batalla de Elviña. Bajo un grabado del águila imperial, en una inscripción, en español y francés, puede leerse: “En memoria del general de brigada francés Josheph Yves Manigalut Gaolis, que sirvió a las órdenes del mariscal Soult, duque de Dalmacia, y muerto en el campo del honor de La Coruña en 16 de enero de 1809”. Descubren la placa en una ceremonia solemne el Alcalde de La Coruña y el Agregado Militar de la Embajada de Francia.

La tercera placa se inaugura en 2009 en la conmemoración del 200º aniversario de la batalla de Elviña. En ella se homenajean al coronel del 5º de infantería John Mackenzie, muerto en Palavea de Abaixo el 15 de enero de 1809, y al general Robert Anstruther, fallecido por enfermedad justo antes de la batalla. El general Moore, agonizante por la herida sufrida durante la lucha, ordena que lo entierren junta a su amigo Anstruther.

5. Granja de los Franciscanos en la Universidad de A Coruña

Casa francés campus zapateira

La Granja de los Franciscanos, en la Casa francés campus zapateira, es en la actualidad un edificio rehabilitado, aledaño a la facultad de arquitectura, que aloja las oficinas del campus de la Universidad de A Coruña. En uno de los dinteles de la granja todavía se aprecia el año de construcción: 1797.

El edificio existente en 1809 sirvió al mariscal Soult para pasar la noche previa a la batalla de Elviña. El experimentado Soult aprovechó la cota a la que se encuentra la granja, y la visual despejada que ofrecía del campo de batalla y la ciudad, para convertirla en su puesto de mando y en el emplazamiento de su artillería. Desde una de las baterías de las inmediaciones de la granja se disparó el proyectil que hirió de muerte al general John Moore.

El mariscal Soult fue uno de los mandos más competentes de Napoleón, pero evitaba a comandar las tropas desde la primera línea, decisión que tomaban con cierta frecuencia los generales de Napoleón. Soult llevaba en el ejército desde los 16 años y había probado incontables veces su valor y su desprecio al peligro, hasta que en 1800 recibe un disparo en la rodilla dirigiendo un asalto contra los austríacos. Prisionero y herido de gravedad, Soult pasó varios días en condiciones miserables hasta su liberación, y el cautiverio causó mella en su disposición a exponerse al fuego en combate.

6. El monolito del mariscal Soult, Duque de Dalmacia

Campus Universidade da Coruña

En el Campus Universidade da Coruña se yergue un monolito conmemorativo de la batalla de Elviña, librada en ese terreno en enero de 1809. La batalla enfrentó a 14.000 soldados británicos comandados por el general John Moore contra 16.000 franceses liderados por el Mariscal Soult.

El monumento se inaugura el 16 de enero de 1998 por el embajador francés, en el punto aproximado donde el general escocés Moore recibe la bala de cañón que le hirió de muerte. En el monolito destaca una placa que reproduce una inscripción que el Mariscal Soult hizo grabar en la tumba de Moore.

La inscripción original en latín es: HIC CECIDIT JOHANNES MOORE, DUX EXERCITUS IN PUGNA JANUARII XVI, 1809 CONTRA GALLOS A DUCE DALMATIAE DUCTOS.

La traducción es la siguiente: “Aquí cayó John Moore, comandante del ejército en la batalla del 16 de enero combatiendo contra los franceses bajo el mando del duque de Dalmacia”.

El mariscal Soult no pertenecía a una familia noble, ingresa en el ejercito con 16 años y asciende en el escalafón militar por sus propios méritos. Dos de los hitos de su carrera se producen en 1804, cuando Napoleón le nombra mariscal, y en 1808 cuando le otorga el título nobiliario de duque de Dalmacia. Los soldados ingleses inventaron un juego de palabras con su título y lo apodaron como: “Duke of Damnation” o “Duque de la Condenación”.

7. Parque de Santa Margarita

Parque de Santa Margarita

El Parque de Santa Margarita, antes Monte de Santa Margarita, es la mayor zona verde de A Coruña. El parque tiene una cota máxima de 61 metros sobre el nivel del mar y domina la ciudad. En 1809, antes de la batalla de Elviña, el monte sirvió para apostarse al ala izquierda del ejército británico de Moore. En la actualidad, en esa cota se levanta la Casa de las Ciencias.

La estrategia del teniente general Moore consistía en retrasar la embestida del ejército del mariscal Soult desde tres posiciones defensivas que cortaban el paso al istmo de acceso a la ciudad. Con una defensa escalonada, Moore buscaba ganar tiempo para que el grueso de la fuerza expedicionaria británica pueda ser evacuada desde el puerto por la marina. La primera posición sobre el Monte Mero, la segunda sobre Oza y la última en el actual parque de Santa Margarita.

En las últimas fases de la batalla, los altos de Santa Margarita son escenario de feroces combates entre la caballería franceses y la infantería de Highlanders. Aunque no participan apenas en la batalla principal, los escoceses se retiraron combatiendo con los dragones franceses, hacia la Pescadería y la ciudad vieja, y alcanzaron su punto de embarque. Por su desempeño en batalla, el 71º de Highlanders lució desde entonces el distintivo “Coruña” en sus colores regimentares.

En 2009, en el bicentenario de la Batalla de La Coruña, se coloca en al parque una placa conmemorativa que informa al visitante sobre los efectos de la batalla y la ubicación los restos del molino de la época.

8. Placa conmemorativa

Cantón Grande, 5

Una placa en la fachada del inmueble de Cantón Grande, 5 señala el lugar donde se ubicaba la casa de Genaro Fontenla, comerciante coruñés. La casa de Fontenla sirvió como refugio improvisado para el agonizante general Moore, herido de muerte por una bala de cañón durante la batalla de Elviña el 16 de enero de 1809.

En la placa reza la siguiente inscripción: “A la memoria del General Sir John Moore que murió en la batalla de Elviña cuando protegía el embarque de las tropas británicas el día 16 de enero de 1808”.

Según relatan los testigos, hacia las 5 de la tarde del día 16, una batería francesa de Peña de Galiacho abre fuego contra la posición que Moore supervisaba en ese momento. Una bala de cañón le arranca parte del hombro y la clavícula izquierda y, por la fuerza del impacto, le desmonta del caballo. Moore se levanta y el capitán Hardinge le aplica un vendaje de emergencia con el fajín para contener la hemorragia.

Debido a la gravedad de las heridas, los subordinados de Moore improvisan unas parihuelas y lo retiran de primara línea. Un grupo de soldados cargan con el herido en parihuelas durante casi 4 km, hasta la casa de Genaro Fontela, donde llegan sobre las 18:30. Los cirujanos militares atienden a Moore sobre una cama improvisada en el salón, pero el general muere sobre las 21:00. En las cuatro horas que vivió desde que recibe la herida, Moore tiene tiempo y lucidez suficientes para decir sus última voluntades y conocer el éxito de la evacuación del ejército.

9. Óleo de la Batalla

Palacio Municipal (Praza María Pita)

El Palacio Municipal de A Coruña es, además de la sede de la Administración local, una pinacoteca con obras en depósito del Museo del Prado y de notorios artistas gallegos. Entre estas obras destaca un lienzo de gran formato titulado “La Batalla de La Coruña”, pintado en el año 2002 por Jano Muñoz (A Coruña, 1971).

El pintor declaró que “La Batalla de La Coruña” fue su primer cuadro de gran formato (250 x 300 cm) y el encargo estaba muy condicionado por los requisitos de autenticidad en el vestuario de los personajes, la topografía del campo de batalla en 1809 y los acontecimientos de la misma. Para añadir más veracidad al lienzo, el artista emplea técnicas pictóricas del siglo XIX.

En 1809, el general inglés Moore era consciente de su posición de debilidad frente al ejército del Mariscal Soult, uno de los héroes de Austerlitz, y ambos contingentes, perseguidor y perseguido, emprenden una carrera hacia los puertos gallegos de Vigo y A Coruña que culmina en la batalla de Elviña.

El cuadro de la batalla plasma el enfrentamiento principal entre los ejércitos inglés y francés en los alrededores de la ciudad herculina. El resultado era previsible, con la retirada británica y la caída de A Coruña en manos francesas. Sin embargo, Soult fracasó en su objetivo de destruir la fuerza expedicionaria de Moore, pues la armada pudo evacuarla con éxito a través del puerto coruñés.

La pintura de Jano Muñoz destaca por su rigor histórico gracias a que el pintor cuenta con la asesoría de una asociación coruñesa de recreación histórica: “The Royal Green Jackets”.

10. Puerto de A Coruña

Avenida do Parrote

El puerto de A Coruña, en la Avenida do Parrote, fue el punto de evacuación del ejército expedicionario inglés que escapaba del ejército del mariscal Soult, muy superior en fuerzas. La batalla del Elviña, también conocida como la Batalla de La Coruña, fue planeada por el general Moore con el fin de ganar tiempo para embarcar las tropas en los barcos de la armada.

El planteamiento del General Moore era arriesgado, pues un fuerte temporal mantenía la Royal Navy fondeada en Vigo y tardaría cuatro días en llegar al puerto de la ciudad herculina. El desenlace es conocido: la retaguardia británica pudo contener al enemigo el tiempo suficiente y, aunque Moore falleció en la batalla y los últimos barcos salieron del puerto bajo el fuego de la artillería francesa, las pérdidas no resultaron significativas.

El último contingente en embarcar fue la brigada Beresford, desde la ensenada de San Amaro, y los últimos soldados ingleses en abandonar A Coruña por el puerto fueron un cabo y el capitán Thomas Lloyd Fletcher, del 23º Regimiento de Fusileros de Gales. El 18 de enero de 1809 ambos soldados debían cerrar el portón de la Torre de Abajo, en la muralla, con la pareja de llaves destinadas a tal efecto. Entra en lo anecdótico que, como se atascaron y no giraban, se ayudaron con una bayoneta… y no las devolvieron. Las llaves con las muescas de la bayoneta se exponen hoy día en en el museo dedicado al regimiento de Fletcher, en el castillo galés de Caernarvon.

11. Castillo de San Antón

Avenida do Parrote

El Castillo de San Antón, ubicado en el Paseo Alcalde Francisco Vázquez 2, es la actual sede del museo Arqueológico e Histórico de la ciudad. La historia del castillo arranca en el siglo XVI, cuando los gobernantes coruñeses deciden edifica una red de castillos defensivos del puerto.

En 1589, aún sin terminar, el Castillo de San Antón demuestra su utilidad en el ataque de la flota de invasión de la Contraarmada inglesa, o Expedición Drake-Norris. Sin embargo, el paso del tiempo y la evolución de la artillería y la construcción naval dejan obsoleto el Castillo y pierde su finalidad defensiva. Desde el siglo XVIII, el Castillo de San Antón sirve de cárcel y de lazareto para los marineros que llegaban con enfermedades infecciosas.

En 1958 el Ministerio del Ejército permuta el Castillo de San Antón con el Ayuntamiento de A Coruña, en 1964 se destina a Museo Arqueológico y en 1968 se inaugura. A partir de 1994 el Castillo es considerado monumento histórico artístico.

El Museo Arqueológico del Castillo de San Antón alberga ofrece al visitante, además de la visita al propio Castillo y anexos, una biblioteca y salas de exposiciones que abarcan, desde la prehistoria, hasta los diferentes acontecimientos que jalonan la Historia de la ciudad.

La exposición consta de tres bloques temáticos: en el patio de armas, arte medieval y heráldica; en la planta baja de la Casa del Gobernador, arqueología y prehistoria, y en la planta alta de la Casa del Gobernador, historia de A Coruña con una sección sobre la batalla de Elviña.

12. Paseo de Sir John Moore

Paseo de Sir John Moore

El Paseo de Sir John Moore es un camino que circunvala el Jardín de San Carlos, lugar de sepultura de John Moore, general de la fuerza expedicionaria británica caído en combate durante la batalla de Elviña en 1809.

Preside el jardín el monumento funerario con el sarcófago que contiene las cenizas de Moore. Al discurrir por el paseo, el visitante descubre cuatro placas grabadas conmemorativas que se añaden con el paso del tiempo.

En 1927, por mediación del alcalde Manuel Casás, se instalan a ambos lados del acceso al mirador dos placas que honran la memoria del general. Una de las placas tiene grabados un extracto del poema de de Rosalía de Castro: “Na tumba do Xeneral Sir John Moore”. La otra placa tiene versos del poema de Charles Wolfe: “The burial of Sir John Moore”.

La tercera placa exhibe parte de la arenga del duque de Wellington en la batalla de San Marcial: "Españoles, dedicaos a imitar a los inimitables gallegos". El aserto del inglés alude a la valía demostrada por los coruñeses durante la batalla de Elviña y por los gallegos durante la guerra en el norte.

Una cuarta placa conmemora a 172 marinos ingleses fallecidos el 10 de noviembre de 1890 en el naufragio del crucero torpedero HMS. Serpent. La placa, colocada por la tripulación del HMS Lauping, contiene un recuerdo a los fallecidos y la indicación del punto del naufragio a 38 millas de distancia, en el Cabo Vilán.

13. Museo Histórico-Militar

Praza Carlos I, 1

El Museo Histórico Militar de A Coruña está ubicado en la Plaza de Carlos I, 1, cerca del Jardín Baluarte de San Carlos y el monumento funerario del general Moore. En el solar del Museo se levantó el desaparecido convento medieval de San Francisco. Los sucesivos edificios se destinaron a uso diverso: cárcel, polvorín, comandancia de artillería o cuartel de la Guardia Civil.

El Museo Histórico Militar comienza a reunir los fondos de su colección en 1858: desde ediciones del siglo XVI de las Partidas de Alfonso X el Sabio, hasta carruajes, maquetas, uniformes, banderas y armamento portátil y exótico procedente de ultramar. Con el final de la Guerra Civil, el museo recibe una importante colección de piezas procedentes de la Región Militar Noroeste e incrementa de forma paulatina los fondos durante las siguientes décadas.

El Ministerio de Defensa y el Ayuntamiento de A Coruña establecen un convenio en 2009 con el objetivo de dotar al museo de mayor infraestructura técnica y duplicar el área de exposición. Con una superficie de 2.500 m², el Museo Histórico Militar de A Coruña ofrece una colección permanente y salas de exposiciones temporales.

El año 2011, la colección estable del Museo se incrementa 400 objetos procedentes del Museo de la antigua Fábrica de Armas de A Coruña. La exposición permanente la integran unas 1.700 piezas que abarcan desde el siglo XVIII hasta hoy, con especial énfasis en objetos relacionados con el Ejército Español y la Historia de A Coruña.

14. Jardín-Baluarte de San Carlos

Paseo de Sir John Moore

El Jardín Baluarte de San Carlos, ubicado en el paseo de John Moore, es un parque público construido sobre lo que fue un castillo defensivo extramuros de la época medieval. El crecimiento de A Coruña terminó por integrar el castillo en el casco urbano y, tras épocas de abandono, se restaura como parque entre los siglos XVIII y XIX. El jardín es, desde 1809 la ubicación del mausoleo del general escocés John Moore, muerto en la batalla de Elviña contra el ejército francés.

El general Moore fallece hacia las diez de la noche del 16 de enero de 1809 por una grave herida causada por una bala de cañón. Evacuado del campo de batalla hasta los cantones, Moore expira en casa de Genaro Fontenla. Un pelotón de ocho soldados del Regimiento nº 71 de Highlanders trasladan el cadáver de madrugada a una sepultura provisional: la tumba del general de brigada Anstruther, muerto dos días antes, con quien Moore pidió ser enterrado.

El sepelio se realiza a toda prisa, de madrugada y con discreción para evitar que los franceses profanen el cadáver cuando tomen la ciudad. El cuerpo de Moore tiene por sudario un capote militar y la Union Jack. Esta primera fosa se encontraba a los pies del Baluarte de San Carlos, a los pies del actual mausoleo. El mariscal Soult, al contrario de lo que temían los ingleses, trató la tumba con respeto e hizo grabar una inscripción conmemorativa.

Cuando los franceses son finalmente derrotados, ese mismo año, el marqués de La Romana traslada las cenizas de Moore a la ubicación donde siguen hoy. El primer monumento funerario es un sencillo zócalo y, en 1824, por iniciativa del cónsul británico Richard Barlett, se sustituye por el actual sepulcro de aire neoclásico.

En 1839, el gobernador militar Francisco de Mazarredo decide embellecer el sitio para honrara la memoria de Moore y comienzan las obras del jardín de San Carlos, de estilo romántico, que perdura hasta el siglo XXI.

15. Calle de Napoleón

Calle de Napoleón

A Coruña es la única ciudad de la España peninsular con una calle dedicada a Napoleón Bonaparte. Pese a ser una figura controvertida con sus luces y sus sombras la historia de A Coruña está ligada a la figura del Emperador. Fue en Coruña donde ocurrió una de las batallas que marcó la evolución de la contienda europea al lograr salvarse gran parte del ejercito inglés que luego combatió en Waterloo y fue con destino A Coruña la epopeya de la gran persecución que enfrentó al General John Moore y a Napoleón Bonaparte.

El alcalde Javier Losada inaugura El 11 de julio de 2009 la Calle Napoleón Bonaparte en el barrio coruñés de Vioño. La vía conecta la Avenida de Arteixo y la Calle de la Revolución Francesa, y forma parte de las seis calles que inaugura el regidor dedicadas a Francia y la Revolución Francesa.

El consistorio de 2009 valoraba más la condición de Bonaparte como heredero de los ideales de la Ilustración y la Revolución Francesa, que como Emperador que dirigió una invasión en España. Dos almas han convivido siempre en nuestra ciudad, el espíritu afrancesado y ligado a la ilustración como ciudad abierta y el reconocimiento del legado británico en la ciudad durante la Guerra de la Independencia con un fuerte vínculo atlántico. Una ciudad que rinde tributo a personajes y hechos históricos protagonizados por los ejércitos de ambos bandos durante las guerras napoleónicas y que merecieron los elogios y la participación de personalidades francesas y británicas.

Cabe destacar que la entrada del ejército de Soult en una rendida ciudad herculina, el 19 de enero de 1809, no resulta tan destructiva como la de otras plazas españolas bien guarnicionadas que no capitularon. Soult, conciliador con los coruñeses, ordena distribuir pan y vino entre los pobres, aunque también exige fabricar zapatos para sus soldados y un ternero a la semana para su propia cocina. Soult rinde honores al recién fallecido Moore y ordena construir una tumba acorde con su rango.

La Calle Napoleón es un símbolo más del impacto imborrable que tuvo Napoleón Bonaparte en nuestra historia.

16. Batería, capilla y faro de Oza

El Faro de Oza es una infraestructura edificada en el siglo XX sobre el emplazamiento de una batería de defensa de costa del siglo XVI. La primera obra de la batería de Oza data de alrededor de 1639 y se levanta en el fondeadero donde desembarcó el ejército de Drake y Norris en 1589.

Entre el siglo XVI y XVIII se crea un sistema defensivo en la ría de La Coruña mediante una red de fortificaciones, murallas y baterías de artillería costera. El complejo fortificado de la Ría de La Coruña es obra de Francisco González de Andía, Marqués de Valparaíso, por encargo del rey Felipe IV.

La batería de Oza forma parte del sistema defensivo de la península de La Torre, junto a las baterías de Durmideiras, Praderías y las de la ensenada de O Orzán. La batería de Oza complementa a la batería de San Diego y cruza el fuego con la batería de Santa Cruz.

La batería de Oza original es un fuerte de planta estrellada con edificios auxiliares para las tropas y una trinchera defensiva. El conjunto consta de dos plataformas: la batería alta y la baja, un parapeto con troneras y un muro defensivo en la cara que da a tierra. El complejo actual es una obra del arquitecto militar Blas Gil de Bernabé fechada en 1797.

El casco histórico de Oza quedaba al pie de la playa de Oza y se extendía desde la Ermita de Santa María de Oza. Durante la batalla de Elviña del 16 de enero de 1809, el general Moore ubica una de sus tres líneas defensivas en la sierra de Oza. Tras un día de escaramuzas y resultado incierto, los británicos aprovechan la noche para escabullirse con sigilo del campo de batalla y embarcar en los transportes fondeados en el puerto de La Coruña.

Al amanecer del 17 de enero, cuando los franceses descubren la retirada inglesa, emplazan su artillería en Santa Margarita y San Diego para bombardear los últimos barcos. La flota de evacuación registró la pérdida de un par de transportes y unas 300 bajas, la mayoría de la King´s German Legion. La retirada de Moore se saldó con la salvación de 26.000 hombres de un total de 34.000.

17. Castillo de Santa Cruz

El Castillo de Santa Cruz forma parte de la red de fuertes, murallas y baterías de costa edificados para defender la ría de La Coruña.

En mayo de 1595, la Contraarmada inglesa de Drake desembarca un ejército de invasión en el municipio de Oza. A pesar de la costosa derrota inglesa a manos de los coruñeses, queda en evidencia que la orilla este de la ría era un punto desprotegido y el Castillo de San Antón en el puerto resulta insuficiente para defender La Coruña.

Ese mismo año comienza la construcción de nuevas fortificaciones defensivas y baterías para cubrir la entrada de la ría bajo la dirección del general Diego das Mariñas. Al Castillo de San Antón se unen el de San Diego y el de Santa Cruz, en la isla homónima frente a la ciudad.

En 1640 se concluyen las defensas del Castillo de Santa Cruz y se instalan las baterías. Destaca el cañón bautizado como “El Barraco”, con un alcance de alrededor de 10 km, instalado a tiempo de impedir el acceso a la ría de una flota francesa. Cuando desaparece el riesgo de invasión naval, durante el siglo XVIII, el edificio queda en desuso y pasa por una época de abandono. José Quiroga, marido de Emilia Pardo Bazán, compra el Castillo en subasta pública en el siglo XIX y lo convierte en pazo de veraneo familiar.

Blanca Quiroga, hija de la escritora, dona al ejército el Castillo de Santa Cruz en 1939 para que sirva de colonia de verano de huérfanos de militares de la Guerra Civil. La fortaleza cumple esa función hasta 1978 y pasa por otro período de abandono. El municipio compra el Castillo en 1989 y desde 2001 funciona como sede del Centro para la Divulgación y Protección del Medio Ambiente (CEIDA).

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